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Enfrentando la muerte para encontrar la vida

Un anciano vino a verme después de la muerte reciente de su esposa. Entre lágrimas, explicó cómo al llegar a casa una noche y encontró a su esposa sin vida al pie de la escalera. Cuando me dijo sus razones para no querer vivir más, sentí una genuina compasión por él. Este hombre, admitiendo sus fallas y debilidades, había vivido una vida plena con su esposa. Tuvieron hijos y nietos e incluso adoptaron niños. En sus años como esposo y padre, hizo su único propósito el proveer y cuidar a su esposa y familia. Ahora que ella se había ido y sus hijos se habían ido con sus propios hijos, ya no podía encontrar sentido en las luchas de la vida.

Si bien este hombre no está físicamente muerto, está experimentando la muerte emocional definitiva: la muerte del ego. Ésta es la muerte que experimentas cuando el Universo te obliga a abandonar algo que es muy importante para ti, dejándote completamente perdido e indefenso. Por ejemplo, quedas paralítico y nunca más caminarás. Descubres que no puedes tener hijos. Te diagnostican cáncer. La persona con la que se suponía que pasarías el resto de tu vida ya no te quiere. Muere tu hijo.

No hay palabras o actos de amor o afecto que puedan llenar el hueco que crea esta muerte. Porque éste es el tipo de muerte que destruye tu alma. Una muerte que te hace cuestionar todo lo que creías saber que estaba bien en la vida. Cuestionas a tu Dios. Dudas de tu religión. Dudas de ti mismo y todo lo que has hecho en la vida, bueno y malo. Y, al final de cada día, todo lo que puedes concluir es que la lucha de la vida se ha vuelto inútil y sin valor.

Éste es el punto que alcanzas en la vida donde contemplas seriamente si la muerte es la opción racional para ti.

El filósofo británico-estadounidense, Alan Watts, declaró: “Si cualquiera de nosotros pudiera tener este momento [como si estuviéramos a punto de morir], de manera genuina y honesta entenderíamos el misterio de la vida. Porque la muerte es la fuente de la vida”. Llegará un momento en que, con los ojos bien abiertos, te verás obligado a renunciar a todo lo que sabes sobre la vida. La razón de esta experiencia extrema es que te trae tanto dolor que no tendrás otra opción que buscar un entendimiento del significado más profundo de la vida. A medida que atraviesas este proceso desgarrador y cuestionas tu razón de vivir, dejarás de lado el sufrimiento emocional, ya sea 1) eligiendo vivir con más significado; ó 2) renunciando por completo a los pensamientos y planes de muerte y suicidio.

Si decides buscar un propósito, debes enfrentar tus miedos y lentamente dejar de lado todo lo que esperabas de tu vida. A medida que encuentres maneras de reemplazar los sentimientos de impotencia y desesperanza con fe en este proceso espiritual, el verdadero significado de la muerte iluminará tu mente, y el miedo a la muerte —emocional y física— se desvanecerá lentamente de tu alma. Y llegarás al punto en que te darás cuenta de que no hay nada que puedas hacer con respecto a la vida, sino aceptarla por lo que es. Esto es cuando tu conciencia natural supera al ego y comienzas a ver el verdadero significado detrás de los actos crueles del Universo.

Hacia el final de la sesión con el anciano, le expliqué que en lugar de centrarse en todas las razones por las que deseaba estar muerto, tal vez podría comenzar a prepararse sabiamente para su muerte. Mientras hablamos, el hombre se entusiasmó cuando hizo planes para hablar con Dios para defender las razones por las cuales quiso dejar la vida y morir mientras dormía, de la forma en que Dios siempre lo destinó. En lugar de llorar, habló sobre cómo podría poner sus asuntos en orden con respecto a su propiedad personal como una forma de prepararse para su muerte. El hombre terminó la sesión diciendo que sería una prioridad hablar con cada uno de sus hijos y decirles cuánto los ama. Este hombre está eligiendo vivir como él elige morir. La forma en que Dios lo quiso.

Nos guste o no, la vida está llena de experiencias que nos traen la muerte emocional. Puedes optar por luchar contra el proceso o puedes aceptarlo para su propósito previsto: una experiencia espiritual destinada a ayudarte a trascender el sufrimiento emocional de la vida con el objetivo final de dejar que el sufrimiento se vaya por completo. Es en el abandono, que encontramos la vida cuando enfrentamos la muerte. Recuerda, Dios contesta todas las oraciones. Haz tu parte y deja de lado el sufrimiento emocional y deja que Dios y el Universo hagan el resto.

Madre Búho

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