Caravana del miedo
Si has estado escuchando las noticias últimamente, es posible que hayas oído sobre la Caravana de inmigrantes que vienen a EE.UU. y la respuesta del presidente Trump a la Caravana. Él está enviando tropas de la Guardia Nacional a la frontera sur para ayudar a las Aduanas y la Patrulla Fronteriza.
Así como el ex presidente Obama reaccionó a la afluencia de niños migrantes en 2014, este Presidente está reaccionando ante la posible llegada de un gran número de personas. Según las noticias y conversaciones con representantes de la Caravana, ellos vienen a EE.UU. en busca de protección contra la persecución en sus países de origen. Verdaderamente una Caravana del Miedo, y el temor de los que vienen en ella se debe multiplicar por diez cuando escuchan que la Administración Trump está enviando tropas de la Guardia Nacional a la frontera para recibirlos.
La ley internacional impide que Estados Unidos envíe a los solicitantes de asilo al lugar donde podrían ser asesinados. Se supone que nuestro gobierno les proporcione a estos inmigrantes una entrevista para hablar sobre su temor y una audiencia con un juez de inmigración. A veces, son liberados con una fianza o rastreador GPS, para que puedan comparecer en una audiencia judicial más tarde. Éste es el proceso que el presidente Trump espera descontinuar, de modo que, en lugar de “capturar y liberar”, el Gobierno los atrape y detenga hasta que el caso finalice (meses o años después). El objetivo es la disuasión. Sin embargo, cuando una persona huye por su vida (o la vida de su hijo), muchas veces están dispuestos a correr riesgos extraordinarios para buscar seguridad.
¿Quién gana en este escenario? La industria de prisiones privadas está ganando muchísimo dinero con la detención de solicitantes de asilo no criminales. Nosotros somos los perdedores, estamos pagando los extraordinarios costos de detención y ayudando con la inhumanidad de detener a niños y separar a las familias, al tiempo que violamos la obligación de Estados Unidos en virtud de los tratados internacionales.
Si te importa, toma una postura y deja un mensaje en la línea de comentarios públicos del Fiscal General Jeff Sessions en el 202-353-1555.