Oiga compadre… Frio (22 febrero 2018)
…¿cómo lo trata el frío?
_¡Hijo de toda sup…!
_¿Así de mal? _No me puedo acostumbrar al frío, nieve, heladas.
_¿En su pueblo no hacia tanto frío? _Nunca. Allá siempre andaba de huaraches, aquí se me congelan los dedos.
_Sí, pues usted es indio pata rajada. _No se lleve compadrito.
_Ya sabe que es de cariño, aguante compadre, ya estamos en las últimas. _Ya me anda por que llegué el calorcito.
_Sí, para luego quejarse de que está muy caliente. _No, yo prefiero andar suda y suda, que tiembla y tiembla.
_Eso sí. Además, no se puede disfrutar en el jardín. _Síii, ya quiero estrenar el asador que me dieron de Navidad.
_¡Ándele! _Fíjese que precisamente anoche estaba soñando con una carne asada.
_...¡mmmh! _Pérese, deje le cuento.
_A ver cuénteme… _Era una mesa muy grande, Había guacamole, tortillas, salsa, totopos, etc. Me preparé el primer taco y me estiré para agarrar la salsa, me estire y me estire y no la alcanzaba...
_Me la hubiera pedido a mí. _Cállese, ¡usted no estaba invitado!... me estiraba y estiraba y nada, y por estirarme tanto… ¡¡¡saz!!! Que me caigo de la cama, y que me despierto... y me dije: ‘¡Qué menso..! ¡me lo hubiera comido sin salsa!’
_¡¡¡Pinche compadre!!!